martes, 4 de junio de 2019

Blindado, La Película

ELENCO: Gabriel Peralta, Luciano Cáceres, Aline Jones, Gonzalo Urtizberea, Luis Ziembrowski, Lautaro Delgado Tymruk, Esteban Menis, Facundo Aquinos, Sandra Smith, Emilio Vodanovich, María Victoria Raposo, Delfina Perotti, Juan Nemirovsky, Adriana Aisenberg, Alba Corina Romero, Pablo Pinto, Nicolás Schneider, Oscar Garce, Nana Cordoba, Zulma Galperin y Ana García Magno.

DIRECCIÓN: Eduardo Meneghelli. 
GUIÓN: Leonel D´Agostino, basado en un guión original de Luis Saez y Antonio Foti. 

Esta película es una historia de vida contada en un lugar que expresa mucho, llena de detalles para que “quien tenga oídos para oír, que oiga”. Un blindado es un hábitat duro, impenetrable, solo habilitado para los destinados a conducirlo. Todos vemos estos camiones circulando por las calles y pensamos lo que transportan pero no en quienes lo conducen.

A Eduardo Meneghelli, el director, le pareció atractivo contar la historia de cuatro hombres que deben convivir horas en ese espacio duro, cerrado, blindado. Sus códigos de vida son diferentes; la lealtad es un pilar que, al fallar, desarma una seguridad que incluye a todos. Los personajes lo dicen claramente: “salimos cuatro, volvemos cuatro”. Son una unidad; si uno quiebra las bases, se derrumban todos; si algo externo los ataca, todos son atacados.

Este director quedó impresionado por la estética de Gabriel Peralta que, tal vez, será su actor “fetiche”, como suele decirse. Puede verse que encontró en él una disciplina actoral y una capacidad de trabajo que marca la diferencia.

Le preguntamos por qué había elegido los textos bíblicos para que salieran como un relato en off, a lo que respondió: “esas palabras salían, en principio, de la radio que escuchaba el protagonista, pero luego observamos cómo estaban en todas las imágenes, en todas las cosas; la voz había trascendido la radio y era la vida misma que hablaba”.

Eduardo Meneghelli nos comentó también sobre el sonido, la fotografía, y los efectos de la película; nos expresó su agrado por trabajar con un equipo que logra resultados tan especiales.

Luciano Cáceres hace un personaje muy cercano al protagonista; él mismo lo define como una especie de consejero. En sus palabras dice de Blindado: “es una historia que cuenta como conviven cuatro seres adentro de un blindado jugándose la vida para cuidar el dinero de los otros”. Realmente con esta definición nos habla de todo lo que puede sentir un hombre que trabaje en estos oficios. En su trabajo actoral, se lo ve como un actor solido, con mucha fuerza expresiva, que acompaña y construye un buen equipo.

Gabriel Peralta es el protagonista de Blindado. Un actor de una potencia impresionante, habla a través de su cuerpo, traspasa la pantalla con la potencia de sus emociones.

El dijo que le importa sostener el trabajo de cumplir el hilo que propone el dramaturgo. Confía ampliamente en el trabajo del director Eduardo Meneghelli, se siente cómodo y confiado. Han logrado ese entendimiento que permite alcanzar un buen resultado. “Mi trabajo habla por sí solo”, esa es su expresión y así de contundente es en su tarea y en su actitud. Habla de su entrenamiento actoral, y dice: “la disciplina me dio libertad”. Se ha formado en varios países y pone todo en mejorar y superarse a través del trabajo.

Podemos observar a un actor que, además de realizar su labor con toda su energía puesta en el papel que le toca desarrollar, piensa y siente que solo el trabajo lo hace posible, entendiendo esta noción como lo que abarca todo su crecimiento personal, profesional y humano y demostrando que por esa vía se logra la calidad.

Los sonidos de la película tienen una contundencia que mantienen la atención del espectador durante todo el film, cosa extraña en estos tiempos en los que la atención se dispersa con facilidad y, en todo caso, para sostenerla hace falta abusar de la imagen y no tanto del sonido. Los ruidos, los textos leídos, los silencios de los personajes, todo habla de una realidad que está presente en cada ser humano de este siglo.

Esta historia que nos muestra al ser humano al límite de su dolor, pero lo cuenta desde su capacidad de transformar, desde el principio al final mantiene la atención; está llena de detalles, señales, emociones. Pasado, presente y futuro se mezclan en esa mente del protagonista; el afán de salvación propia y ajena hace de ese personaje una parte de la historia de cualquiera de nosotros. Todos custodiamos tesoros ajenos, todos caminamos buscando la libertad, una redención que se alcanza de formas raras, impredecibles. Un final que deja muchas imágenes, nada termina de una sola manera, nadie está del todo solo; aun en un blindado somos vulnerables, nos necesitamos, solo el amor transforma las cosas.

Fui a ver esta película pensando en un robo, sexo, violencia,…y me encontré con un tesoro escondido justo en la mente del que pueda y quiera oír.



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